En noviembre, con aire frío, cambios de temperatura y ambientes cerrados, muchas personas notan moqueo acuoso, congestión o estornudos ante perfumes, humo, limpieza del hogar o clima.
Si tus pruebas de alergia son negativas y los síntomas aparecen por irritantes (no por alérgenos), puede tratarse de rinitis vasomotora o no alérgica. A diferencia de la alergica, no suele dar picazón de ojos o garganta, y a menudo es persistente todo el año.
¿Qué es y por qué ocurre?
La rinitis no alérgica es una hiperrespuesta de la mucosa nasal a estímulos como cambios de clima, olores fuertes, humo o contaminación, que desencadenan congestión y goteo sin que el sistema inmune esté reaccionando a un alérgeno..
¿En qué se diferencia de la rinitis alérgica?
- Desencadenantes: irritantes (clima/olores/humo) vs. alérgenos (ácaros, pólenes).
- Síntomas: menos prurito ocular/faríngeo en la no alérgica; más rinorrea acuosa y congestión.
- Pruebas: en la rinitis no alérgica, las pruebas de alergia suelen ser negativas. Por eso es clave la valoración clínica.
Qué puedes hacer en casa
- Identifica y reduce tus disparadores: perfumes intensos, humo, productos de limpieza irritantes.
- Lavados nasales con solución salina 1–2 veces al día.
- Protege del aire frío (bufanda/mascarilla) al salir temprano o por la noche.
- Evita usar descongestionantes nasales.
¿Cuándo consultar?
- Síntomas persistentes más de 4 semanas o que afectan tu sueño o trabajo.
- Secreción unilateral con mal olor, fiebre o dolor facial intenso.
- Necesidad de usar descongestionantes diarios para “abrir” la nariz.
Centro de ORL – Contáctanos
099 275 3345
Quito: Calle B N31-124 y Av. Mariana de Jesús, Centro Médico Picasso, primer piso.
Cumbayá: Av. Pampite S/N y Padre Carlos, Edificio Officenter, Oficina 216.


